fbpx

4. Emociones complementarias: vergüenza, ansiedad, culpa, enojo

TRISTEZA

Hoy comenzaremos a ver la invitación que nos hace cada emoción. Cada una de ellas, es maestra. Cada una de ellas nos invita a una acción o a una pausa. Nos invita a un cambio, a un desafío, a una profunda reflexión.

Hoy vamos a ver qué nos enseña la tristeza. Algo nos enseña. ¿Qué? ¿Qué puede enseñarte la tristeza?

Que hay algo que no está como quisieras….que algo falta… que algo duele…. Sacando la tristeza de los duelos, de la cual ya hablaremos, la tristeza es una gran invitación… Es bueno escaparnos de ese dolor o negarlo? No!!! Lo mejor es Sentirlo!! Atravesar esa etapa! Es mejor expresarlo!! Sentir qué nos pasa en el cuerpo y si hay necesidad de llorar, hacerlo! Nunca reprimirla. Dejarla ser… hasta que escuchemos su mensaje!! Para algo está allí. Si pudieras preguntarle a tu tristeza: ¿Qué me querés enseñar? ¿Qué me querés mostrar? ¿Qué te diría? La emoción, dijimos que es tu GPS. Solo hace falta que escuches qué dirección te pide que tomes. Y la tristeza, es una emoción que te invita a la calma, a no tomar decisiones apuradas, a reflexionar, hasta te invita a dejar reposar el cuerpo para que todo tome un lugar distinto… Ahora, es importante no confundir el mensaje… Muchas veces nos ponemos tristes porque alguien hizo algo que no nos gusta…”me dejó”, “ me mintió”, “ me lastimó”, etc…. Cualquiera que sea este tipo de respuestas, si creés que alguien te hizo algo, estás olvidando que nadie “te hace” nada, sin tu permiso. Recordamos lo que hemos visto en la cuarentena de relaciones. Cada persona viene a enseñarte algo, por lo tanto, si la tristeza viene por algo que creés que te hicieron, es un gran momento para evaluar, replantear, observar dónde estás vos situado/a en esa relación… Y la tristeza es, en ese caso, una invitación a mejorar o cambiar algo en esa relación o a encontrarte con vos mismo/a en esa relación. Muchas veces la tristeza aparece porque creemos que no podemos hacer nada. Y no es cierto.

Siempre podemos un cambio de mirada, que nos permita un cambio en lo que ocurre. Si la tristeza habla de cosas que no te gustan de vos, ahora mismo podés hacer un cambio. Qué te gustaría cambiar? Qué cosas necesitarías cambiar? Qué paso darías hoy para hacerlo? La tristeza tiene un lenguaje corporal especial. Una sensación física. Falta de ganas. Falta de motivación. Cuando decidís ver lo que te dice la tristeza, podés prometerte a vos mismo hacer eso que ella te pide…Seguramente que en un primer momento no vas a tener ganas de hacer ese cambio. Date tiempo! Ese cambio es siempre a un cambio espacio más positivo……Enfocá…¿Qué pasaría si lo hicieras? ¿Cómo te sentirías después?
Es importante que te des un tiempo para hacerlo. No es necesario que salgas a correr para hacerlo en ese mismo instante… pero date un tiempo para que esa tristeza deje tu cuerpo…que salga de él… Dale lugar a un nuevo espacio de paz, que vaya tomando un lugar en vos, de más calma… más contención… Podés darte un abrazo vos mismo/a, contenerte en esa tristeza, la tristeza te da un mensaje que es necesario descubrirlo en el silencio… Qué le dirías a tu mejor amigo/a para atravesar este momento? Decítelo a vos mismo/a… Y mímate mucho!!!

Es un momento para darnos todo el amor que seamos capaces de darnos. Sentir la unidad con nuestra Fuente, que siempre está brindándonos su amor y su apoyo… La tristeza también nos invita a dejarnos mimar por nuestra Fuente…es un momento para entregarnos a ella y soltarle nuestro dolor, para que lo reciba
y lo alquimice…Quizás no haya nada para hacer en este instante, solo dejar que todo pase… que nuevas fuerzas reaparezcan… que nuevos vientos soplen, que una sonrisa renovada se anime a salir de tus labios!!

La tristeza es pasajera… pero no pasa sola… si ves que ya lleva mucho tiempo, hacé algo para que salga… Tomar sol, Aumentar la serotonina de tu cuerpo… Encontrarte con tu bienestar… Ya vimos eso en la primera cuarentena!!! No permitas que la tristeza se quede a vivir para siempre con vos!! Y ella le abrirá las puertas a la alegría… será su antesala, su mensajera… la invitará a pasar para que tu vida tome un giro, para que algo sea diferente y mejor para vos… Animate a conversar con esa tristeza que te visita de vez en cuando… y verás que ya no aparecerá de manera profunda, que ya te susurrará, en lugar de gritarte!!! Y será una amorosa guía a un lugar de mayor expansión para tu ser.

LA CULPA 

La culpa es una de las emociones más corrosivas para las personas. ES un gran grillete que la sociedad desde los siglos de los siglos se encargó de fomentar y perfeccionar. La culpa es esa declaración de que algo “grave”
hicimos, por lo cual “ no merecemos” el perdón… Hoy hablaremos del sentir culpa. Otro día hablaremos del culpar a otro… dos caras de la misma moneda!

No hablamos hoy desde la religión, que interpreta al ser humano como pecador. No hablaremos desde la abogacía, el derecho, el sistema político, que determina responsabilidades cuando alguien se aparta de las normas. Hablaremos de la emoción. Esa percepción interna de haber cometido un error y que en nuestro fuero íntimo juzgamos. A partir de la autodeclaración de culpa, sufrimos, nos sentimos mal, nos castigamos, nos sentimos diferentes al resto, como con una “mancha” que nos hace no merecedores de lo bueno… Culpas por ser diferentes, por ser demasiado niños, demasiado adultos, por haber sido abusado o abusada, por haber sido violado o violada, culpa por si alguien se ofendió, culpa por …. Miles de razones… Hasta las culpas de haber perdido embarazos, de que seres queridos se mueran… EL universo de la culpa es infinito y tan personal, que alguien que observa no puede entender los motivos por los cuales la persona quedó atrapada en ese grillete. Nuestro ego se cree el actor de todo, con suficiente poder para ser actor y protagonista de todos los eventos por los cuales nos sentimos culpables, sin entrar a cuestionar que ellos provienen de hechos para los cuales no hemos podido tener ninguna intervención ( la muerte de alguien, a menos que yo haya sido el asesino) o hechos en los cuales he actuado sin tener la consciencia de lo que ocurría o no contaba con la información necesaria en ese momento para actuar de otra forma.
Como sea que ocurrió, es mi cabeza la que juzga que en eso que pasó, mi intervención fue esencial. Y decide, sufrir.

Y si pudiéramos ver que no había cómo cambiar lo ocurrido? Que lo que fue, fue asi y no hay forma de volver atrás. Si puedo cambiar algo, lo cambio. Si no lo puedo cambiar, me perdono. Me declaro inocente! No tenía cómo actuar de otra forma. Y si lo hice, me hago responsable de mi acción , sin juzgarme. Solamente haciéndome plenamente consciente de mi acción, sin juicios, sin necesidad de victimizarme asumiendo culpas. En definitiva, la culpa es el gran argumento que nos inventamos para atarnos al sufrimiento. ES el programa de sufrimiento por excelencia. Nos mantiene atados al pasado y al futuro. Condenándonos a vivir un presente lamentable… El pasado mantiene la vigencia que yo decida darle en tanto me siga considerando culpable. NO levantaré mi condena hasta que haya sufrido lo suficiente, me haya martirizado una buena cantidad de tiempo, o decida que ya pagué condena, boicoteándome, condenándome a no ser feliz , no dándome lo que merezco de bueno en la vida… El futuro está condicionado, ya que hasta que no levante mi condena, seguiré decidiendo mi culpa y mi condena una y otra vez… Qué podemos hacer para dejar de sentir culpa? Saber que la culpa es una gran ilusión de la mente. ES la gran excusa que me puse para no ser feliz y no tener paz. Elijo mi paz. Elijo sanar! Elijo levantar mi condena!! Y vivir lo bueno que merezco vivir!

Como dice Un curso de Milagros: La verdad acerca de nosotros es que somos inocentes. El perdón no destruye el pecado y la culpa. No tiene que hacerlo. Simplemente los hace desaparecer con la verdad. El perdón invita a la verdad a que entre en la mente “y a que ocupe el lugar que le corresponde en la mente” El programa de culpa corroe, va a la raíz de nuestra desvalorización, de la infelicidad, del sufrimiento… Cuando decidimos liberarnos, cambia nuestra vida. Nos sacamos una enorme mochila y vamos más livianos… Esto no nos hace irresponsables de nuestras acciones, por el contrario, nos hace más conscientes y responsables, para dar de nosotros lo mejor en cada momento… Si vivimos desde la benevolencia, desde los pensamientos y acciones benevolentes, tenemos una manera más que efectiva de prever que siempre estaremos actuando desde lo mejor de nosotros… libres de cualquier ilusión que pueda llevarnos a autocondenarnos a la infelicidad eterna!

LA VERGÜENZA

En algunos países a la vergüenza le dicen “pena”… Es una emoción que se vive con angustia asociada… Está el sentimiento de “mancha”, el juicio de que algo está mal con nosotros, por lo cual puedo ser juzgado/a públicamente por algo de mi vida privada, o si expongo algo de mi…
Cuando hay vergüenza, escondo, dejo de mostrarme, me anulo, no me permito ser. No despliego mi potencial, no me muestro o lo hago con mucha dificultad. Síntomas como problemas de piel, están relacionados a esta emoción. Generalmente tienen como raíz, creencias aprendidas de pequeños, vividas con juicios de desvalorización de adultos o pares. O historias vividas que son juzgadas como “malas”, “sucias”, “pecaminosas”:.. En algunos casos, esa emoción surge y no es por algo vivido por la persona, sino que pertenece a alguna memoria del clan. EN ese caso, hay que ver historias no resueltas de algún ancestro, para trascenderla. En todos los casos, la vergüenza surge por un juicio, una interpretación dada por la persona. Y ésta, como otras emociones, nos invita a trascender esa incomodidad, esa limitación y a ver qué nos muestra. ES una invitación a trascender ese juicio y convertirlo en una acción de valor para nosotros. Si nos cuesta mostrarnos públicamente, la vergüenza será una invitación a poner todos nuestros recursos a disposición para lograr mostrarnos sin sentir ese malestar. Cómo? Liberándonos de esos juicios, que están relacionados con miedos.

Vemos entonces, que la vergüenza y el miedo van de la mano. Ya veremos el tema del miedo. Por ahora veremos que esta emoción nos invita a “limpiar”
la interpretación de “mancha”… No existen manchas… existen vivencias que nos enseñan recursos, que nos ayudan a sanar historias nuestras o del clan. Que son grandes momentos para poner otros recursos – que sin esa emoción- , no hubiéramos tenido que desarrollar. Si no hubiera tenido vergüenza, por ejemplo, no me hubiera enfocado en tener buena comunicación con las personas… La emoción, nos hace desarrollar estrategias de superación. Y convertir en recursos las dificultades…

EJERCICIOS:
Escribí en tu cuaderno…
¿Qué recursos te aporta la vergüenza?
¿Qué estrategias utilizaste para “tapar”? Y si no tuvieras que “tapar”, ¿qué mostrarías?
¿Si pudieras ser libre de ese juicio, de esa interpretación, qué harías?
¿Y si lo hicieras?
¿Y si te declararas libre?
¿Qué harías si no tuvieras vergüenza?
¿Y si lo hicieras?
¿Lo harías?
¿Cuándo?

Podemos declararnos libres de todo, cualquier declaración que hayamos hecho por la cual decidimos no mostrarnos es una ilusión, un juego de nuestro ego que nos limita y trata de dejarnos en el lugar del sufrimiento y de la víctima.
Trascender la vergüenza sabiendo que no hay nada que ocultar, que no hay nada equivocado, mal, sucio, nos permite ser libres y vivir con autenticidad. La verdadera invitación de la vergüenza es trascenderla dándonos cuenta de que todo está bien en nosotros, que somos personas haciendo nuestra mejor experiencia posible, que hemos permitido quedar atrapados por juicios de otras personas, o juicios que surgen de compararnos, de mirar hacia afuera, de vivir condicionados por estereotipos sociales, culturales, temporales… No hay manchas…. No hay motivos para esconder quienes somos….Si hay alguna experiencia que aún juzgamos, debemos sanarla, para no arrastrar más esa emoción…. Vivir plenamente siendo nosotros mismos, de cara a nosotros mismos y a los demás, siendo libres, auténticos, sin nada que esconder! IR livianos por la vida… Qué maravillosa invitación que nos hace la vergüenza cuando decidimos trascenderla…. ¿Aceptás?

ALEGRÍA

La alegría es una de las emociones básicas que nos conectan con los aspectos más vitales de nuestro Ser. De niños, somos alegres por naturaleza: risa fácil,mirada aventurera, sentimientos de amor por todo y por todos….La alegría está en nuestra esencia!! Como decíamos en días anteriores, cada emoción es un GPS. La alegría nos indica placer, algo grato, algo que nos gusta, que nos da un sentido positivo…Podemos describirlo con más palabras y a la vez, reconocer fácilmente los indicadores físicos de la alegría: risa, liviandad, respiración profunda, expansión en el pecho… La alegría nos permite ver a nuestro alrededor un mundo mejor, lleno de posibilidades… Volvemos a ver diferencias. LA emoción es la alegría. Algo ocurre que nos gusta, nos da alegría y reaccionamos…eso indica que eso que ocurrió es bueno para nosotros… Sostener la alegría en el tiempo, es el sentimiento… Bienestar, felicidad…ya hablaremos de eso…y ya hemos hecho los 40 días haciendo foco en nuestro bienestar, para ver cómo encontrarnos con el bienestar de manera permanente… Hoy vamos a hablar de la alegría como emoción…y presten mucha atención: porque si depende de algo externo… Qué cosas nos “dan” alegría? …Podría ser la alegría algo que elijamos? ¿PODRÍAMOS ENCONTRAR UN ESTÍMULO “INTERNO” PARA LA ALEGRÍA?

Porque si esperamos que gane nuestro equipo de fútbol, que alguien nos llame, comprar algo caro para que nos de alegría, o un viaje…el resto del tiempo ¿qué hacemos?

EJERCICIO:
¿Que te “da” alegría?
¿Son estímulos externos o internos?
¿Podrías encontrar estímulos internos que te brinden alegría?
¿Cuáles?
¿De quién dependen esos estímulos?
¿Podés generarlos ahora, en este momento?
¿Qué te genera la alegría en tu cuerpo?
¿Qué ocurre con lo que pasa a tu alrededor cuando estás alegre?
¿Podrías hacer que haya más estímulos interiores que te brinden alegría?

La alegría depende de vos, además de que haya estímulos externos, si o si, tiene que haber una predisposición tuya y una disponibilidad para la alegría. Si no, por más estímulos “externos” que haya, no encontrarás a la alegría disponible para vos. ¿Qué cosas nos conectan con la alegría? Eso es personal. Puede ser para algunos abrazar a tus hijos, a tu pareja, disfrutar de tus mascotas, de tus plantas, de una música, un atardecer, el río, mar… un paisaje…. Pero sin esperar eso, alegría puedo sentir de mi trabajo cada día, de abrir mis ojos y sentirme vivo/a, preparar el desayuno para mi familia, o limpiar mi casa porque me encanta tener un techo donde vivir…. El sentido es fundamental. Puedo darle sentido a una bocanada de aire o no dárselo. Quién creés que va a estar más conectado/a con la alegría?
Definitivamente quien le de un sentido a esa bocanada y entienda que la magia de todo comienza allí… Cuanto mayores son mis expectativas, menos conexión tengo con la alegría. Cuanto menos disfrute lo simple, menos conexión. Cuanto más resistencia a aceptar lo que es y darle yo mismo/a el sentido, menor alegría voy a experimentar. Si me resisto a ver que lo que está en mi mundo no me gusta tal como está, menos preparado/a voy a estar para el cambio… Si elijo la alegría como un estado emocional importante para transitar en mi día a día, buscaré y encontraré la forma de experimentarlo!! Nada externo puede prepararme para ser feliz: Ninguna sustancia ( droga, alcohol, cigarrillo), ningún acontecimiento ( ejemplo, ganar la lotería), ninguna persona. Solo yo puedo decidir dejarme atrapar por la alegría y vivir en función de ella… ¿Problemas? ¿Dificultades? Puedo decir: Cuántos desafíos que la vida me da o puedo amargarme por ellos… Otra vez pregunto: Quién estará más disponible a la alegría… Y cuando generamos la alegría, más simplemente se resuelven las cosas!!! TE invito a reflexionar acerca de esto! Ya veremos cómo los estados emocionales que elijamos transitar nos brindan una vida más saludable, más feliz, y con mucho más sentido!! Gracias por estar allí. A mi me da mucha alegría escribir… ayudar, brindarles mi trabajo para que ustedes puedan conectar con su mejor versión…. Vamos todos por más!!!

DESAGRADO

El desagrado, el asco, el reaccionar a algo que no te gusta de manera repugnante… es una emoción totalmente guía. El GPS de que algo no nos gusta y no tenemos por qué aceptar… Esa emoción nos protege. Nos brinda una invitación al placer… evitar aquello que no es de nuestro agrado, es sano!! Si algo no nos gusta, podemos irnos… dar media vuelta… Si hay un olor, una imagen, un gusto, un acontecimiento que lo produce y nuestra reacción es automática de desagrado, es totalmente válido para mostrarnos lo que no queremos para nosotros….Manifiesta por medio de respuestas biológicas nuestra posibilidad de elegir. Elijo no vivir aquello que me desagrada. Hay dos aspectos a tener en cuenta del desagrado: Una, cuando ese desagrado es compulsivo… Ejemplo, si porque no me gustan las cucarachas, evito ir a todos los lugares donde pueda haber … o si me desagradan los gérmenes, vivir lavándome las manos por temor a haberme “ pegado” uno… En ese caso, la emoción de asco, va ligada al miedo. Y lo que hay que analizar es el miedo, para ver qué expresa esa emoción. Ahora, cuando ese desagrado o asco se manifiesta hacia otras personas… es un tema para observar. Muchos dicen no estar cómodos ante personas que “ no son de su agrado”… Algunas por motivo de sexo, de raza, de religión, de “clase social”, o adictos, o alcohólicos… o jóvenes, o ancianos.. la gama de personas puede ser variada… Vamos allí a uno de los puntos iniciales del prejuicio.

En ese caso, sería bueno revisar a qué recuerdo o a quién nos remite ese “desagrado”… Quizás situaciones de nuestro pasado que han sido desagradables… Si ese recuerdo no sanó, cada persona con características similares generarán en mí desagrado. Y no será la persona, sino el recuerdo no sanado de una situación vieja. Lo mismo, si en mi vida he aprendido respecto a un prejuicio, si he crecido con él o ese prejuicio fue válido para mi clan, también estaré reproduciendo desagrado por personas que “ portan” esas características. En ese caso, siempre es bueno recordar que cada persona es maestra y que el prejuicio solo nos aleja. Que manifestar asco o desagrado por alguna característica de una persona, tiene que ver con cosas no resueltas nuestras. Y no por lo que juzgamos“ defectos” o “ fallas” o lo que sea de la otra persona, que no lo son. Acá estamos nuevamente, como lo hemos visto en la cuarentena de relaciones, en el ámbito de nuestros juicios. Y ellos nos deben llevar a ver en qué parte nosotros mismos nos desagrada. El asco es una emoción que nos ayuda a elegir… siempre y cuando esa elección sea espontánea por algo que ocurre y no aprendida en el marco de un prejuicio.

EJERCICIO:
¿Qué cosas te desagradan?
¿Qué evitaste con el desagrado?
¿Probaste con el paso del tiempo ver si cambió tu gusto?
¿Sentís desagrado por personas?
¿Son personas puntuales? ¿Qué características tienen esas personas?
¿A quién te recuerdan?
¿Son grupos de personas? Ejemplo: “ los pobres”… “los ricos”… etc
¿Dónde aprendiste ese rechazo?
¿Podrías ver a esas personas como maestras? ¿Qué te enseñarían de vos?

SORPRESA

Hay veces que olvidamos la importancia de esta emoción. La ¡SORPRESA! UN evento inesperado, imprevisto, no usual. ES una emoción que produce un efecto especial en el cuerpo, de corta duración, en lo gestual y en lo biológico!! Para algunos puede ser tomado como un refresco emocional! Aunque para otros, las sorpresas, son fuente de conflicto emocional.

Hay personas que evitan las sorpresas…que no les gusta ser sorprendidos por ninguna circunstancia, por lo cual tratan de controlar todos los detalles de su vida, para que no aparezca ninguna. Bloquear para que no aparezcan sorpresas, puede llevar a conductas de control, manipulación, rigidez, fobias, obsesiones….Sin embargo, estar abiertos a que la vida nos sorprenda suele ser una habilidad que permite fluir y vivir con más apertura, flexibilidad, libertad. A veces, las sorpresas, nos ayudan a movernos de una emoción de tristeza, o de apatía….Interrumpe el estado emocional previo y genera un cambio… tiene la función justamente, de corrernos, de hacer un cambio. No toda sorpresa puede ser agradable, sin embargo la explicación que le demos al evento, nos va a dar el sentido y la invitación que nos hace esta emoción… SI algo nos sorprende de manera agradable, es que lo que aparece es importante, de valor. La invitación de la sorpresa, puede ser a tener más presente esa circunstancia, esa persona, esa situación en nuestra vida… Si lo que nos sorprende no es “agradable”, es una invitación a soltar máscaras, a ver las cosas de otra manera, a tener otra perspectiva de las cosas…. A veces, la sorpresa nos saca de la rutina, de espacios de costumbre, de zonas de confort. Puede ser tenido en cuenta como recurso para compartir esta emoción con otras personas… generar sorpresas agradables a otras personas, nos puede dar una pequeña motivación a nosotros mismos. Dar es darnos!!! TE gustaría sorprender a alguien con algo agradable? Y si lo hicieras hoy? Nos contás después qué pasó? Podemos hacer que sea un día de hermosas sorpresas!!!

EL ENOJO

Primera parte

El enojo, es una emoción que suele afectar relaciones, personales, laborales, profesionales. Pero a quien más afecta es a uno mismo. Cuando lo reprimimos suele afectar profundamente nuestra salud. Cuando lo dejamos salir libremente, también!!! Es importante aprender a gestionar nuestros enojos. Y para ello, es importante comprender esta emoción. El enojo es una respuesta automática compleja que une lo que ocurre en el exterior con creencias, respuestas físicas y emocionales que traemos de nuestro pasado. Aprender a gestionarlo nos ayuda a no enfermarnos, a no estar irritables, a comunicarnos mejor con las personas, a estar más enfocados, a estar más saludables, a dormir mejor, a tener menos estrés. Ya veremos el detalle de las “enfermedades” asociadas al enojo, que van desde “ligeros” temas digestivos hasta el cáncer. Es importante ver que el enojo nos pertenece como creencia y como reacción. Por qué? Todo lo que nos enoja, habla de nuestro mundo, tiene que ver con nosotros!! Si algo me enojó, tengo que ver qué me dice el enojo de mi propio mundo. Esta es la parte más difícil, porque es más fácil enojarse con otros, que ver cuál es el mensaje real que el enojo nos trae. Vamos a observarlo bien. No todo nos enoja. NO a todos nos enoja lo mismo. Entonces, por qué te enoja lo que te enoja? Porque habla de cosas que a vos te sacan, te producen algo personal… No te enoja lo que pasa “ajeno”… Todo enojo te afecta porque tiene que ver con algo tuyo. Tus creencias, tus heridas abiertas, tus acciones reprochables…o temidas…. Dice Choppra: “Tanto aquellos a quienes amamos como aquellos por quienes sentimos rechazo, son espejos de nosotros. Sentimos rechazo hacia las personas que nos reflejan las características que negamos en nosotros.
Si sientes una fuerte reacción negativa hacia alguien, puedes estar seguro de que tú y esa persona tienen características en común, características que no estás dispuesto a aceptar. Si las aceptaras, no te molestarían. Cuando reconocemos que podemos vernos en los demás, cada relación se convierte en una herramienta para la evolución de nuestra conciencia. “ A muchos esto “ los enoja”, valga la redundancia!!! Por ejemplo, lo que más me dicen en las consultas es: Yo no soy como un violador!!! Y les pregunto : Qué parte tuya estás violando de vos mismo/a? Y siempre hay alguna…. El “violador” que tanto nos enojó, nos mostró que esa característica nos estaba afectando a nosotros en algo directo e inmediato. Esa característica nos pertenecía, no en la misma forma. Pero sí con un efecto nocivo!! Al darnos cuenta, podemos modificarlo. Y al modificarlo, sanamos y ya no nos van a enojar las mismas cosas. No es que nos va a pasar indiferente… esa es la otra
pregunta que me hacen… No es que ya nos va a resultar indiferente un violador. Pero!!! Podremos ver la situación y ver que si nosotros ponemos más enojo, reaccionaremos creando una cadena de enojos mayor… Ya lo explicaré más adelante, cuando veamos los potenciales negativos que creamos desde el enojo.
¿Cómo sanar el enojo? ¿Cómo gestionarlo?

LIBERARNOS DEL ENOJO

Segunda parte

Ya vimos en la propuesta del DÍA 3, que los Pensamientos Benevolentes son una forma inmediata de cambiar y bajar el nivel del enojo. Revisamos entonces la propuesta del día 3 para liberar el enojo. Y vamos a completarlo con otras formas.

Para desarmar el mecanismo automático del enojo – accionar y no reaccionar-, toma una respiración profunda abdominal ( llenás la panza, luego el pecho, soltás el aire despacio, por boca ) y luego cuenta hasta 10. En
lo posible, tomando respiraciones profundas en medio del conteo. Esto rompe el automático de la reacción de nuestro cerebro primitivo y permite que sea el cerebro frontal el que responde, analiza, observa. El primitivo no lo hace, solo reacciona. A su vez, permite recomponer la respiración y el ritmo cardíaco. Buscamos con esto cortar la respuesta inmediata, y tener una respuesta más reflexiva y serena. Luego trabaja con tus creencias y emociones del pasado. Observarlas, cuestionarlas y transformarlas ( esto lo vimos ya en los 40 días haciendo foco en nuestras creencias expansivas), te ayudará a que tus enojos no destruyan tu calidad de vida. Es importante saber cómo respondes ante el enojo, qué lo produce, qué reacciones físicas están asociadas, para poder comprender y gestionar esta emoción.

Si el enojo continúa después de observarlo y tomar consciencia de él, hay que revisar las memorias familiares y del clan. Pueden venir ellos de situaciones no resueltas del árbol genealógico. Esto se trata en las sesiones de neurodescodificación. Se trabaja con metodologías especiales, sobre todo, analizando el árbol.

Como decía en mi libro de Comunicación, una danza para mejorar nuestras relaciones, es importante que el enojo sea un simple viento y no un huracán en tu vida. Te invito a aprender a observar tus enojos, a accionar y no reaccionar, y buscar que ellos no “te” tengan!

CONSECUENCIAS FÍSICAS DEL ENOJO

El enojo trae como consecuencia innumerables manifestaciones físicas. El cuerpo se adapta a la situación emocional que está viviendo. Nos dice Enric Corbera: “Todo síntoma tiene un sentido, un sentido biológico, un ¿para qué? Toda adaptación tiene un Sentido. ” Tratado de Biodescodificación.

El cuerpo responde ante nuestro enojo, ese que no nos atrevemos a mostrar, ese que no dejamos salir, el que no nos atrevemos a contar, el que masticamos entredientes, en silencio, el que nos da miedo que otros vean… Hay algo que podemos expresar, pero hay algo que guardamos… porque “en nuestro entorno no está permitido”, porque “en nuestra familia no se habla de estas cosas”… o “porque mi pareja se va a enojar si yo hablo”…Detrás de los enojos silenciados hay mucho miedo!! Nuestro cuerpo entra en incoherencia: hay una información que “recibimos” y que no podemos procesar…no sabemos cómo…Nuestro equilibrio se rompe. El cuerpo responde adaptándose para tratar de compensar ese desequilibrio, desarrollando funciones específicas. Una vez que esto ocurre, es importante encontrar el mensaje que ese síntoma nos trae. El síntoma físico se convierte en una gran oportunidad para resolver las emociones que nos desequilibran.

El enojo puede ir asociado a otras emociones. Por lo cual, no hay un solo análisis del enojo y su síntoma… Sin embargo, vamos a hablar de algunos de los síntomas usuales que responden a los enojos.

ES importante reconocerlos, identificarlos, sacar la emoción a la luz, sin daños a otros, ni a nosotros mismos. Y es importante sanar la emoción para que el síntoma no se siga desarrollando.

Para la neurodescodificación ( biodescodificación, o descodificación biológica) una vez que el síntoma desaparece, el cuerpo recupera su función original, desaparece la emoción y el cuerpo tiende a reestablecer su equilibrio.

Esto que parece tan mágico, no lo es. Aunque sepamos que soltando el enojo podemos sanar nuestros síntomas, muchas personas no están dispuestas a resolverlos, no están dispuestas a perdonar, a resignificar o reinterpretar sus emociones.

Por eso, más allá de conocer el síntoma que te causa el enojo, es importante un compromiso total con resolver la emoción. No es solo “reconocer que estás enojado/a”…es estar dispuesto/a a sanar totalmente el enojo, despojándote de tu ego, de viejas creencias, de viejos patrones mentales.

ES importante, si no lo lográs, pedir ayuda especializada. Trabajar en tus enojos, suele ser aún más efectivo que tomar pastillas o esconderte en adicciones, o tomar “calmantes”. Esos son paliativos, maquillaje para tu alma!!

ALGUNOS SÍNTOMAS DEL ENOJO

BULIMIA, LA MAYORÍA DE LOS DIFERENTES TIPOS DE CÁNCER: CÁNCER DE COLON, CÁNCER DE ESTÓMAGO,DE INTESTINO, PROBLEMAS DE INTESTINO DELGADO, PÁNCREAS, PROBLEMAS EN LAS VÉRTEBRAS DORSALES…

El ENOJO va asociado a otras emociones, dijimos. Por ejemplo, desvalorización, impotencia, miedo, temas relacionados a la supervivencia,ETC.

UN enojo no resuelto, genera un ramillete de emociones. Nuestros pensamientos van a desencadenar en una innumerable cadena de interpretaciones asociadas a otros conflictos emocionales no resueltos.

Por lo tanto es importante sanar las emociones de base ya que el enojo suele reforzarlas, y agravarlas.

El equilibrio emocional es clave para una vida saludable. Hay que dedicarle a la vida emocional, a la paz, al equilibrio tiempo, dedicación y compromiso.

ES FUNDAMENTAL TOMAR CONSCIENCIA DE ESTO. TU SALUD ESTÁ EN TUS MANOS, CUIDANDO TUS EMOCIONES. Y PARA CUIDARLAS ES IMPORTANTE UNA BUENA INTERPRETACIÓN DE TU VIDA, DEL SIGNIFICADO DE LAS CIRCUNSTANCIAS QUE OCURREN EN TU VIDA… ´
Recordá que la felicidad, el bienestar, la salud, la paz están en vos, son parte de tu esencia… Solo vos podés decidir que las circunstancias no te saquen de tu equilibrio…y no te quiten la salud.

ELEGÍ TU EQUILIBRIO EMOCIONAL

El equilibrio lo elegimos. No es algo que ocurre “afuera” nuestro. ES algo que decidimos. Podemos saber que hay catástrofes, que el país o el mundo están en crisis, y nosotros mantener igual nuestro equilibrio. ESto no es vivir en una burbuja, ni aislarse, ni desentenderse de lo que ocurre. Simplemente es elegir qué actitud voy a tomar frente a todo lo que ocurre. Si lo que pasa “me provoca” enojo, rabia, miedo, etc., eso que “provoca”,ya estaba en mi…era una emoción pre. existente y lo que ocurre “afuera” no hace más que darme más razones para potenciar mi emoción, es alimento para ese estado emocional, al cual elijo potenciar atando a él mis juicios, mis interpretaciones y mi visión. Si elijo el equilibrio, porque elijo mi salud, mi paz mental y emocional, elijo ser protagonista de mi vida, puedo observar lo que ocurre y desapegarme. Siempre, aún de las circunstancias más extremas, puedo elegir qué actitud tomar… Ya Frankl lo decía recluído en un campo de concentración!!! Si podemos elegir la actitud que queremos tener frente a las cosas, habremos dado un gran paso. ESto es un aprendizaje que se hace. Aprender a gestionar nuestras emociones, a tomar de ellas lo que cada una nos enseña, y soltar lo que nos impide el equilibrio. Aprender a interpretar las cosas de manera positiva, una forma que abra siempre posibilidades, y no que las cierre! Aprender a identificar antes de que estallen mis emociones, prevenir esos nefastos estallidos emocionales..El equiliibrio se logra, en
beneficio de nuestra salud, ya que el estrés y las demás enfermedades son producto de emociones no resueltas, de emociones que quedaron sin cauce. También en beneficio de mis relaciones, y de mi calidad de vida. Si estoy en equilibrio puedo ayudar mejor a las personas que me rodean. Una persona en desequilibrio difícilmente pueda colaborar en momentos de tensión. ASí que , la mejor opción para cualquier circunstancia, es el equilibrio….esto no quiere decir que en algún momento no pueda algo entristecerme, o enojarme… pero esa emoción ( siempre y cuando no se trate de un duelo) durará cada vez menos tiempo en mi vida. Los invito a experimentar un día de equilibrio. ¿Cómo? ¡Elegilo! Repasá los días anteriores de la cuarentena.
Hacé los ejercicios Observate Expresate, buscá diferentes formas de hacerlo.

¡El equilibrio emocional es posible! ¡Solo depende de vos!

Ir arriba
Abrir chat
1
Escanea el código
Atención al cliente
Hola 👋, Bienvenido a Escuela Punto Cero
¿En qué podemos ayudarte?