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La mirada cuántica del ser humano y la transformación personal

TEMAS 

  • Aportes de la física cuántica.
  • Distinción entre discurso y práctica de la Física Cuántica.
  • La invitación que te hace la física cuántica: Ser un nuevo observador.

APORTES DE LA FÍSICA CUÁNTICA

¿QUÉ RELACIÓN HAY ENTRE LA FÍSICA CUÁNTICA Y LAS PERSONAS? 

El Dalai Lama dijo una vez: “Ningún modelo de realidad está completo sin la física cuántica”. La física cuántica nos aporta el conocimiento de la forma en la cual funciona la energía y sus propiedades. 

El ser humano es energía. Los pensamientos, las emociones, nuestro cuerpo lo son y por lo tanto hay propiedades de la física cuántica que vemos manifestadas en el ser humano. 

Hay descubrimientos de esta ciencia que nos aportan miradas totalmente diferentes del ser humano, que cuando los sabemos y aplicamos, cambian nuestra vida. 

FÍSICA CUÁNTICA: UNA NUEVA MIRADA 

¿Qué nos permite a las personas? ¿Se puede aplicar a la vida cotidiana? ¿Cuál es el nuevo paradigma cuántico? ¿Qué aporta a las personas? ¿Qué nuevo planteamiento tiene en relación con el tiempo? ¿Qué nos permite esto? ¿Qué pasaría si aplicáramos todo esto? ¿Cómo cambiaría nuestra vida? ¿Cambiaría algo? ¿Cambiaría el estilo de liderazgo? ¿Cambiarían nuestras relaciones?

Todo esto cambia cuando comprendemos todo desde la mirada cuántica. 

➢ Distinción entre discurso y práctica de la Física Cuántica 

Mientras asistimos al debate de los físicos acerca de si la física cuántica si o la física cuántica no…. Y mientras algunos se preguntan y niegan que ella tenga alguna aplicación para el ser humano, hay quienes vemos cada vez más la aplicación de sus principios y quienes creemos que por primera vez, la humanidad asiste a un maravilloso acercamiento entre la espiritualidad y la ciencia. 

Cuando trabajamos en Coaching Cuántico, no lo hacemos con la mirada que puede tener un científico. En todo momento tenemos presente que lo que hablamos es una narrativa, que trae los elementos de la física cuántica a la mirada y la comprensión del ser humano.

Y a la vez, hay propiedades de las cuales habla la ciencia, las leyes, como la de desdoblamiento del tiempo y del espacio tienen tanta validez para el ser humano y tienen tanto impacto, que esto crea también un nuevo paradigma para el ser humano, no solo para la ciencia, sino para su propia vida. 

Entonces distinguimos y vamos a observar claramente cuando hablamos de: 

  • La narrativa o el lenguaje de la Física Cuántica, aplicada al ser humano como aprendizaje.
  • La aplicación de la Física Cuántica en nuestra vida, como principios y leyes que se aplican en su totalidad al ser humano.

El campo unificado de consciencia, la resonancia, la vibración, el entrelazamiento cuántico, el observador, el holograma, el pensamiento como energía, la Ley de Desdoblamiento del tiempo y del espacio, el futuro como una vibración diferente de espacio tiempo, los potenciales, las sincronías, las causas/efectos, son algunos de los conceptos y temas esenciales que la física cuántica nos ofrece para hacer un cambio sustancial.

He tomado cursos que me han ayudado a comprender ámbitos de aplicación de la Ciencia para el Ser humano, con el Dr. Jean Pierre Garnier, una invaluable charla con Amit Gotswami, quien fue el primero en inspirarme a investigar la relación entre la física cuántica y la comunicación. Y de la mano de innumerables textos, que me han llevado a una conclusión: abrir nuestra mente a la física cuántica implica convertirnos en observadores diferentes de nuestra realidad. Creadores. Protagonistas. Proactivos y equilibrados… 

LA INVITACIÓN QUE TE HACE LA FÍSICA CUÁNTICA: SER UN NUEVO OBSERVADOR 

¿Qué significa esto? 

La física cuántica nos dice que el observador modifica lo observado. Experimentos, debates científicos y muchos dolores de cabeza para los que trataban de entender y explicar esto, los llevaron a esta conclusión (¡aunque en física cuántica pareciera mejor no hablar de conclusiones, porque siempre se está encontrando algo nuevo!) 

Si somos observadores conscientes, si nos convertimos en personas conscientes del tipo de “observadores” que somos, podemos comenzar a modificar nuestra realidad, cambiándola si no nos hace bien, potenciándola si queremos algo más de ella. Hacer foco en el tipo de observadores que somos nos ayuda a generar profundos cambios, que podremos realizar a veces paso a paso y a veces, muy rápido.

Esto implica saber que somos absolutamente responsables de la vida que estamos viviendo, porque sabemos que depende de nosotros y solo de nosotros. Es nuestra energía la que puede cambiar nuestra vida cotidiana. Si mi observación es la que cambia, no puedo atribuir responsabilidades a otros. 

Te dejo un ejercicio… ¿Podrías observar todo hoy teniendo en cuenta la responsabilidad que tenés en la observación de tu vida? Si mirás tu trabajo, una relación, tu casa, ¿qué cosas sentís que responden a lo que realmente observás y querés y cuáles creés que no tenés responsabilidad?

¿Es muy larga la segunda lista? ¿Qué pasaría si vieras que si sos responsable de eso que no querés, solo porque lo estás observando desde el miedo o la duda, o los pensamientos negativos? Por ejemplo, si estás en un trabajo donde sentís que no te valoran, y le echás la culpa a tu jefe. ¿Podrías ver que estás en un trabajo que responde a la observación que hacés? Probablemente observes que te desvalorizan y te pagan poco. Falta de autoestima y programa de carencia económica… ¿Cuántas veces vivís desde ese programa? ¿Y qué generás cuando vivís desde allí? Más de eso mismo. Es la observación de vos mismo/a que hace que, de todas las posibilidades, tomes esa, de manera totalmente inconsciente para vos y te aparezcan ese tipo de trabajos, ese tipo de jefes, esos montos de dinero.

Cambiar el observador implica cambiar esa energía, observándote diferente, cambiando el programa de carencia (programa: es el conjunto de pensamientos, emociones, respuestas físicas o energía) que te lleva a crear más de eso.

Todos preguntan a esta altura: ¿Cómo? No te preguntes “cómo”. Esa es una de las grandes preguntas que la física cuántica no se hace y acerca de lo cual hablaremos mucho a lo largo de la formación. Solo pregúntate “Qué querés lograr”.

NO PREGUNTES “CÓMO” 

Algunas cosas que aprendemos de la mirada cuántica es equilibrar la energía para nuestros desafíos cotidianos. Uno de esos aprendizajes es el camino al logro de nuestros objetivos. Cuando nos preguntamos “¿Cómo hago para hacer algo”? nos surgen emociones y creencias. Todos nuestros programas, hasta nuestro cuerpo responden a esa pregunta… Y la programación siempre surge de la pregunta ¿Cómo? Está muy arraigada esa pregunta en nuestra vida, en la planificación estratégica de las organizaciones. Es “la pregunta” y por eso tiene a la vez, tanta carga energética.

Respuestas físicas que nos llevan a espacios “negativos”, como inquietud, miedo, ansiedad o las que nos llevan a espacios “positivos”, euforia, acelere, adrenalina a tope…

¡Todas ellas nos ponen en acción desde el miedo o desde el poner esa fuerza extra que empuje contra todo miedo! ¿Los reconocés en vos? ¿Cuál es tu “programa” cuando te preguntás ese “Cómo” a aquello que tanto querés? Ese programa se activa cuando aparece esa incertidumbre respecto al futuro, a lo que viene, a lo desconocido. Y no sabemos cómo va a ser, pero ya imaginamos algo y en esa imaginación activamos respuestas. La mayoría de las veces encontramos respuestas creativas, avanzamos, logramos, y sentimos que el “costo” que pagamos es alto: estrés, agotamiento, exceso desgaste de energía, etc.

Es que el “Cómo” activa hasta los programas ancestrales, preguntas que se han hecho o nos hemos hecho en el pasado y han tenido diferentes resultados. Algunos muy buenos y otros muy “malos”. Y ese camino “pasado” tiene un peso extra en nuestros días. Nos llenamos de preguntas, de historias, de experiencias pasadas que conscientemente o no, desde lo energético, “vienen” con nosotros…

Ese paquete tiene un peso extra a la hora de accionar. ¿Qué pasaría si pudiéramos soltar ese peso a la hora de hacer? ¿Iríamos más livianos? Sin tanto desgaste energético, físico, emocional, mental.

Una forma de hacerlo es preguntar en lugar del ¿Cómo? … ¿Qué? ¿Qué tengo que hacer?

El “cómo” abre el campo de las infinitas posibilidades. Y no todas ellas son las que necesitamos para nuestro camino. El qué define de todas ellas, la mejor, la que tiene que ver con nuestro mejor futuro.

Para responder a ese “qué”, nos guiamos con otra lógica: intuiciones, respuestas claras, enfoque, relajación, con conexiones creativas mayores, desde un espacio mental, emocional, energético y biológico diferente. 

Recorrer el camino de esta forma implica un cambio de paradigma, esto es, una forma totalmente diferente de movernos frente a las cosas que pasan. Con más serenidad, confianza, certeza, sin miedos y sin dudas, en sincronía con la vida y el camino. Abrimos un camino que no tiene tanta lógica, según el viejo paradigma, pero sí tiene sentido. 

Aparecen conexiones, personas, situaciones que nos brindan justo lo que necesitamos para lograr lo que queremos, cosas sin explicación, nuestras ideas se potencian, nuestras acciones son más definidas y no requieren tanto desgaste, hasta nos da más energía para hacer las cosas, el tiempo pasa y no lo sentimos como peso, de hecho, hacemos más en menos tiempo. 

¿Qué pasaría si lo pudieras experimentar? Te invito a hacerlo, verás cuánta más energía encontrás para recorrer tu camino. ¡Todo esto nos permite la mirada cuántica y mucho más!

VER MÁS ALLÁ DE LO QUE VEN NUESTROS OJOS 

Nuestra vida está formada por cosas que vemos y cosas que no vemos. Y aquellas que no vemos, tienen muchas veces más fuerza. El iceberg, tan utilizado en varias disciplinas para explicar esto, representa claramente, la mirada cuántica. Lo que vemos es solo una punta de un iceberg, donde leyes y principios que no conocemos están basando lo que sí vemos. Lo que “vemos” y “no vemos” tiene que ver lo “macro”, lo más grande, de algo que ocurre en lo “micro”, lo más pequeño.

Varios temas de lo que tomamos para ver la aplicación de la física cuántica al ser humano, se basan en esto. Muchas de estas cosas, sería imposible explicarlas en pocas líneas. Pero basta con enumerar temas que tienen incidencia en tu vida, y que seguramente te lo preguntaste: Por ejemplo, la intuición, las anticipaciones, las sincronías. Los encuentros “casuales” con personas que aparecen después de haber pensado en ellas, las historias de “coincidencias” que hacen que dos personas se encuentren… Muchos se debaten entre darlos por ciertas o no, porque siempre se dijo que eso era “irracional”. Saber que son maravillosamente irracionales pero que implican una lógica muy profunda, nos daría la guía necesaria para resolver todos nuestros problemas diarios y encaminarnos hacia nuestro futuro, con mayor certeza y equilibrio.

Hay varios temas que se relacionan con esto: el campo cuántico, como aquella parte de la “realidad”, la que vemos y la que no vemos, la posibilidad de crear nuestra mejor realidad, sabiendo “que “estamos brindando como información y energía a este campo. La relación entre probabilidades y certeza. El concepto de intercambio de energía, para ver nuestras interrelaciones emocionales, físicas y mentales con otras personas. Y lo más apasionante y revolucionario, la ley de desdoblamiento del tiempo y del espacio del Dr. En Física Jean Pierre Garnier Malet, la certeza de que hay un desdoblamiento en todo el universo que nos permite equilibrarnos, comprendiendo su funcionamiento.

Otro tema fundamental y acerca de los cuales aún no sabemos el alcance que puede tener, es el de la mente. Y de esto hablaremos mucho con Carolina Pereira coach de la formación. Ya se habla de una mente cuántica. Ya hay un gran cambio de paradigma que incluye el pensamiento, la forma en la cual pensamos, y qué generan nuestros pensamientos. ¿Quién fabrica los pensamientos? ¿Qué generamos con ellos? ¿Hay otra forma de pensar? Y en la respuesta a estas preguntas también encontramos la forma de serenarnos, más claridad y enfoque en nuestro día a día, aprendemos a desarticular los pensamientos de miedo y duda, y al “resetear” programas mentales arraigados en nuestro ADN y nuestras células por mucho tiempo, aún antes de nuestro nacimiento.

Lejos de pensar en el ser humano tan “atravesado” por una mecánica cuántica que nos pueda desvincular de nuestro ser, de nuestra esencia, por el contrario, nunca se estuvo tan cerca entre la ciencia y la espiritualidad. La explicación a conceptos planteados por la espiritualidad, hoy día la ciencia se anima a responderlas y está al servicio del hombre. Ya la física cuántica en su gran mayoría no duda de la existencia de un creador, omnipresente, previo a la creación, una inteligencia presente en todo, y que nos brinda información precisa para lograr vivir nuestro propósito y nuestro camino.

La mirada cuántica nos permite transformarnos y ver cuanto más es posible para los seres humanos y para nuestra vida. Es una mirada desafiante, inquieta, irreverente que cuestiona lo aprendido y nos invita a desaprender y reaprender. Hay mucho por delante. Hay mucho para estudiar, para comprender, para transformar, pare descubrir. ¡Esto recién empieza!

Desde este espacio, el desafío es abrir esa puerta, para que cada uno desde lo que haga se anime a recorrerlo. Desde el trabajo individual, lográs cambios impensados, logro de objetivos, mayor equilibrio, menos estrés, más claridad, liviandad y plenitud. Con otras personas, potenciás resultados, comprendés mejor las relaciones, generás vínculos más armoniosos. Desde la relación con tu planeta, generás más responsabilidad.

En todos los casos, no podés dejar de verte como responsable de tu vida, de lo que creás y de lo que vivís. Comprendés el alcance de Crear y Co-crear, con ese creador omnipresente. Acá no voy a lograr explicar todo lo que implica atravesar estas puertas, solo puedo decirte, que es como tomar la pastilla roja de Matrix: nunca serás la misma persona. Cuando comiences a recorrer este camino, porque descubrirás todo el potencial que estaba disponible para vos, para tu mejor futuro, para vivir una vida llena de propósito y sentido.

Lo que observa el Coaching Cuántico – EL ICEBERG 

Lo que creemos que es la realidad.
Lo que no vemos.
Lo que no vemos es tan real y sostiene lo que vemos.

Nosotros como Coaches Cuánticos nos especializaremos en ver aquello que está bajo la superficie. Y en este programa aprenderás a ser observador de eso que no se ve, pero que sostiene, apoya y mueve lo que sí se ve.

Desde nuestra mirada, tanto lo que no se ve como lo que sí se ve, conforma lo que llamamos “la realidad”.

Nuestra mirada hará foco en lo que no se ve y nos convertiremos en observadores impecables de lo “invisible”. Siendo muy cuidadosos de no suponer, adivinar, llenar los puntos no visibles con creencias.

Lo invisible deja muchas huellas. Son códigos, que aprenderemos a descodificar. (NO utilizamos esta palabra en el sentido de la biodescodificación.)